Hoy en día, ver una piel bonita es un marcador de vida saludable y que la persona se cuida. Y es que la piel es el órgano más extenso del cuerpo y el que hace de barrera y protección directa con los agentes externos. Pero además de actuar como barrera cutánea, ayudando a mantener la temperatura y balance de fluidos, también se ha descrito como una parte integral de los sistemas nervioso, inmunológico y endocrino (1-2).
Ahora bien, la parte más exhibida de la piel suele ser la cara, que de forma diaria se expone a las radiaciones solares, contaminación, maquillaje e irritaciones. Por todo ello, y no solo por la parte estética, sino por todas las implicaciones y funciones que tiene la piel, es importante cuidarla de forma adecuada, según las características de cada persona.
Sin embargo, es muy frecuente que no tengamos claro qué tipo de piel tenemos y, en consecuencia, no usemos el cosmético y la textura idónea para cada uno.
Además, es posible que el tipo de piel vaya cambiando con el paso de los años, por la edad o por factores externos. Por eso, es importante reflexionar de vez en cuando y analizar si realmente tenemos el mismo tipo de piel que habíamos pensado hasta ahora.
Olvídate de todo lo que sabes sobre el tipo de piel, abre tu mente y descubre tu verdadero tipo de cutis para usar la textura cosmética adecuada para este momento de tu vida.
Distintas clasificaciones para determinar el tipo de piel
Determinar el tipo de piel no siempre es tarea fácil, incluso hay técnicas o programas informáticos que ayudan a clasificarla (2).
Fue en 1915 cuando la industria cosmética comenzó a tener auge y la empresaria Helena Rubinstein clasificó la piel según 4 tipos: seca, grasa, mixta y sensible (3).
Sin embargo, durante la historia ha habido varias clasificaciones. En 1975 surgió la famosa escala de Fitzpatrick, la cual catalogó la piel por diferentes fototipos. Este tipo de clasificación es especialmente útil para determinar la capacidad que tiene cada piel a quemarse y broncearse cuando se expone a las radiaciones ultravioleta (4).
Si bien, durante la historia se han descrito otras clasificaciones, como la que hace la dermatóloga, autora e investigadora estadounidense Leslie Baumann. Ella describe 16 Tipos de Piel Baumann distintos y defiende que es importante tener en cuenta que los tipos de piel que ella descibre pueden cambiar por diferentes situaciones como el embarazo, la menopausia, mudanza a diferentes climas y por cambios en la dieta o hábitos. Los tipos de piel Baumann se basan en clasificar la piel primero en si es Grasa o Seca y si ésta es Sensible o Resistente. Una vez tenemos esto la clasifica por Pigmentada o No pigmentada y por Arrugada o Estirada. Con todo estos datos, obtiene 16 tipos diferentes de piel (5).
5 tipos de piel
Hemos visto cómo hay diferentes clasificaciones que determinan los tipos de piel. Si bien, basándonos en la clasificación de la Academia Estadounidense de Dermatología (AAD, American Academy of Dermatology, por sus siglas en inglés), y la más usada hasta hora, tenemos los siguientes 5 tipos de piel (6):
- Normal: este tipo de piel es conocida científicamente como piel eudérmica, debido a que tiene un buen equilibrio. Es decir, que se caracteriza por tener una textura suave, sin imperfecciones y regular. Este tipo de piel no tiene brillos y no es sensible.
- Seca: piel áspera, descamada o incluso agrietada. Puede haber picor y enrojecimiento. No suelen verse los poros y se ve una tez apagada, poco elástica y con líneas de expresión más visibles (7).
- Grasa: este tipo de piel se caracteriza por tener unas glándulas sebáceas de gran tamaño que producen una mezcla de lípidos, llamada sebo, de forma excesiva. Este hecho da como consecuencia la apariencia de piel con brillos y grasienta. Suele tener poros dilatados y puede ocasionar acné (8).
- Mixta: significa que tienes la combinación de dos tipos de piel. Suele ser la combinación entre piel grasa y la piel normal o seca. Por tanto, por su característica grasa tiene poros dilatados, brillos y puntos negros. Normalmente aparece en la zona conocida como zona T que es la frente, la nariz y barbilla. Por otro lado, las características de la piel seca o normal en las mejillas y el resto de la cara con posiblemente falta de brillo, líneas finas y arrugas. Si notas diferentes texturas en tu rostro, quiere decir que tienes la piel mixta.
- Sensible: La piel sensible puede definirse desde la perspectiva objetiva pero también desde la subjetiva del propio paciente. Según Farage, M. A, la percepción objetiva de la piel sensible se basa en la evaluación del dermatólogo a la reacción cutánea. Entre estas reacciones se incluyen el tipo de reacción de la piel al eritema, descamación, ronchas y erosiones entre otros. Estos signos no siempre están presentes. Sin embargo, los efectos subjetivos sí lo están. Con relación a la percepción subjetiva que tiene la persona que tiene este tipo de piel, nota quemazón, ardor, picor, tirantez después de varios estímulos ambientales. Es decir, es una piel que suele reaccionar cuando se expone a estímulos internos y externos. Es una piel fina, frágil, no uniforme y suele presentar cuperosis (aparición de capilares dilatados en el rostro) (9-10).

Teniendo esta clasificación presente, debemos tener en cuenta que da una idea general de los diferentes tipos de cutis que podemos tener, y que es posible tener una combinación de varios tipos de piel, como es el caso de la piel mixta. Por otro lado, fuera de lo que se suele pensar, una piel grasa no es lo contrario de piel seca, ya que una cosa es la producción de sebo por las glándulas sebáceas, y otra la hidratación de la piel y la capacidad del estrato córneo para retener agua. (8)
Test para averiguar tu tipo de piel
Vale, pero esto es la teoría. ¿Cómo puedo saber yo qué tipo de piel tengo realmente?
Para averiguar qué tipo de piel tienes puedes hacer un test simple. Lávate la cara con un limpiador suave y espera unos 30 minutos sin aplicar ningún producto. Pasado este tiempo observa tu piel. ¿Sientes tirantez? ¿O tienes zonas con brillos? ¿Tienes sequedad en una parte de la cara y otras la tienes grasienta? Dependiendo de cómo sientas tu cutis, revisa los 5 tipos de piel anteriores y se te será más fácil determinar tu tipo de piel.
Si aún haciendo el test tienes dudas, puedes acudir a un profesional para realizar un análisis de tu piel, dónde aplicarán las técnicas necesarias para orientarte en usar las texturas cosméticas más adecuadas para ti.
Texturas cosméticas para cada tipo de piel
Muy bien, ahora que ya sabemos a grandes rasgos qué tipos de pieles hay, vamos a analizar las diferentes texturas cosméticas para saber cuándo usarlas.

Ya que, como habrás observado, existen varias texturas en los cosméticos. Y aunque hay muchas clasificaciones, de forma general clasificamos las texturas cosméticas faciales en:
- Textura gel: Se caracterizan por absorberse de forma rápida y ser texturas ligeras, no grasientas, que matifican la piel. Suelen ser transparentes y gelatinosas. Producen sensación de frescor. Es ideal para pieles mixtas o grasa y para zonas con pelo, como la barba (11). Dentro de los geles hay diferentes tipos dependiendo de la concentración de uno de sus ingredientes, el polímero. Por ejemplo, encontramos:
- Sérums o suero facial: contiene más concentración de ingredientes activos pero pocos excipientes, facilitando la absorción. De esta forma se aplican ingredientes efectivos de forma más rápida que una crema tradicional. Existen multitud de sérums, con ingredientes diferentes, y cada uno orientado a diferentes objetivos. Algunos por ejemplo pueden incluir ingredientes antienvejecimiento, hidratantes o también como antimanchas. Suelen recomendarse como suplemento a nuestra crema diaria. Independientemente de esto, debido a su textura, es un producto que de forma general puede usarse en todos los tipos de piel.
- Emulsiones o cremas: Las emulsiones son las cremas de toda la vida y podemos jugar en que sean más ricas o más ligeras. Son un tipo de preparado semisólido, formada por dos tipos de fase: una fase oleosa, una acuosa y además, tienen emulsionantes para conseguir su mezcla. Para entenderlo, es el tipo de textura que también nos encontramos en alimentos, como en la mayonesa. Según la proporción de cada una de las fases puede variar su indicación. Hay dos tipos de emulsiones:
- Emulsión O/W (aceite en agua, Oil in Water, por sus siglas en inglés): están compuestas por una mayor cantidad de agua que de aceite. Es decir, que el aceite está dentro del agua. Suelen estar indicadas para todo tipo de piel, dependiendo de la proporción de las fases y de los ingredientes.
- Emulsión W/O (agua en aceite, Water in Oil, por sus siglas en inglés): en este tipo de emulsión el agua está dentro del aceite siendo éste el que está presente en más cantidad. Por esta razón, suelen ser cremas más espesas y ricas, indicadas para pieles secas y sensibles. Dependiendo de la proporción de cada fase (agua y aceite), pueden también ser de interés para tratar patologías secas como la psoriasis o algunos eczemas.
- Gel-crema: son texturas más innovadoras. Es una emulsión de gel en aceite. Es como una mezcla de crema y gel, con una textura más ligera que la crema. Son también texturas ligeras, no grasas, idóneas para pieles mixtas o grasas (12).
Ahora bien, no significa que una persona con piel seca no pueda usar un gel, y que una con piel grasa no pueda aplicar una crema. Depende mucho de la composición del producto final y de los ingredientes usados. Además, de los estudios que se hayan realizado y los resultados obtenidos sobre los diferentes tipos de piel.
Para asegurar que un producto específico es para tu tipo de piel, revisa la etiqueta, no sólo la parte frontal del cosmético, y averigua más detalles así como si se indica para qué tipo de piel está formulado. A menudo se incluyen reivindicaciones cosméticas según en qué tipo de piel se hayan hecho los estudios.
Comentarios finales
En la historia ha habido varias clasificaciones que diferencian el tipo de piel y siguen habiendo actualizaciones. Sin embargo, la más aceptada hasta ahora es la que clasifica los tipos de piel en normal, seca, grasa, mixta y sensible.
Ten presente que antes de comprar un cosmético es importante que siempre que puedas revises el envase. Mira qué textura es y para qué tipo de piel. Al lado de los ingredientes puedes encontrar información de los estudios para saber en qué tipo de piel es más idóneo.
Es muy importante que dediques un tiempo a valorar tu tipo de piel, ya que usar cosméticos no adecuados para ti podrían perjudicar tu piel, en lugar de mejorarla.
Si tienes dudas, ¡pregunta a tu profesional para orientarte mejor!
Referencias
- (1) Chuong CM, Nickoloff BJ, Elias PM, et al. What is the ‘true’ function of skin? Experimental Dermatology. 2002 Apr;11(2):159-187. https://doi.org/10.1034/j.1600-0625.2002.00112.x
- (2) Indriyani, I., & Sudarma, M. A. D. E. (2020). Classification of facial skin type using discrete wavelet transform, contrast, local binary pattern and support vector machine. Journal of Theoretical and Applied Information Technology, 98(05). bit.ly/3HNxsVj
- (3) Baumann L, Weisberg E. The Baumann Skin Typing System. In: Baumann L, Saghari S, Weisberg E. eds. Cosmetic Dermatology: Principles and Practice, 2e. McGraw Hill; 2009. Accessed February 02, 2023. bit.ly/3YmVrSg
- (4) Roberts, W. E. (2009). Skin type classification systems old and new. Dermatologic clinics, 27(4), 529-533. bit.ly/3Xqoc0I
- (5) Baumann, L., Amini, S., & Weiss, E. (2005). Nueva clasificación de los tipos de piel y sus implicaciones en Dermatología Cosmética. Dermatología Venezolana, 43(4). bit.ly/3jUbpEt
- (6) Skin Care Tips Dermatologists Use. (10 de febrero de 2023) American Academy of Dermatology. https://www.aad.org/public/everyday-care/skin-care-basics/care/skin-care-tips-dermatologists-use
- (7) Spencer, T. S. (1988). Dry skin and skin moisturizers. Clinics in Dermatology, 6(3), 24-28. bit.ly/3HPNZIn
- (8) Sakuma T, H, Maibach H, I: Oily Skin: An Overview. Skin Pharmacol Physiol 2012;25:227-235. doi: 10.1159/000338978 bit.ly/3xdNenE
- (9) Farage, M. A. (2019). The prevalence of sensitive skin. Frontiers in medicine, 6, 98. bit.ly/3RPMIWf
- (10) Alvira,Beatriz. Piel sensible. Offarm. 2004;23(11):68-74 https://www.elsevier.es/es-revista-offarm-4-articulo-piel-sensible-13069629
- (11) López García B, Ortonobes Roig S, García Rebollar C. Ungüentos, pomadas, cremas, geles y pastas: ¿es todo lo mismo? Form Act Pediatr Aten Prim. 2015;8(4):183-7 bit.ly/3HNpMSZ